EditorialesNoticias Destacadas

“DESAFÍOS Y OPORTUNIDADES DE LOS CANDIDATOS POLÍTICOS EN UN MUNDO DIGITALIZADO»

Los candidatos de las PASO se enfrentan a desafíos y oportunidades únicas en un mundo cada vez más digitalizado, para conectarse con los votantes acercándoles sus propuestas. Pero, ¿Aprovechan las herramientas tecnológicas para hacerlo, interactúan con los ciudadanos para conocer sus demandas?

La manera de hacer política hoy en día, ha experimentado un cambio significativo en comparación con otros tiempos, teniendo en cuenta el mundo digitalizado en el que vivimos.

Antes, el votante se centraba en el partido, ahora en el candidato

 

A diferencia de otros momentos de la historia, la atención se dirige al candidato, más allá del partido que represente.

Vemos  a candidatos que  hoy están de un lado y mañana del otro. En términos futboleros diríamos, que hoy son de Boca y mañana de River. Con la diferencia que en el futbol nos llamaría la atención que esto pase, pero en la política, -el arte de lo posible-, todo puede suceder.

Antes, las campañas y los candidatos eran presenciales, ahora son semipresenciales o virtuales. Palabras estas que se nos hicieron familiares en la pandemia.

Los candidatos de hoy tienen una presencia constante en las redes, publicando selfies o vídeos: con el perro, haciendo un asado, o lo que se les ocurra. Todo esto con el claro objetivo  de poder conseguir el voto de sus seguidores.

Mientras que en el pasado, la interacción con los votantes era más personal y se hacía a través de mítines y debates presenciales. O sea, había más trabajo en el territorio.

Antes, eran más los ciudadanos que asistían a las urnas, ahora el porcentaje de quienes votan, lamentable es menor.

Según el sitio oficial, argentina.gob.ar, el relevamiento de datos históricos, indica que las cifras más altas de participación de votantes se registraron en las elecciones de 1983 y 1989 superando más del 85%,  inmediatamente después a la recuperación democrática.

Selfie con el candidato. De visita en Rosario

En la década de 1990 los porcentajes bajaron un 82%.

Tras la crisis económica, política y social desatada a principios de siglo, el porcentaje se mantuvo por debajo del 80% hasta el año 2015.

En las presidenciales del 2019, la participación en las PASO estuvo en un 76.40%

Tendencia que también se puede ver reflejada en las últimas elecciones del 2021, que en las PASO la participación fue de un 67,78%, aunque en las generales el número suele subir.

Si bien los candidatos de hoy tienen nuevas herramientas y oportunidades para llegar a sus votantes, también es muy cierto que se enfrentan a nuevos desafíos, aunque aún  quedan pendientes resolver los viejos, cómo: salud, educación, seguridad y vivienda.

Con estas nuevas herramientas, los candidatos de hoy ¿llegan a los votantes? ¿Las aprovechan para transmitir sus propuestas? ¿Las utilizan para interactuar con los ciudadanos, a tal punto que se acerquen a las urnas, no solo por la obligatoriedad del voto, sino por la convicción que les da su candidato?

Es innegable que estamos viviendo un entorno de desconfianza y de falta de credibilidad en la clase política y por momentos en los partidos que representan.

Encontrándonos con candidatos, que en algunos casos tienen abundancia de palabras, agresiones, discusiones estériles y ausencias de propuestas.

Por eso, es fundamental que los líderes políticos encuentren formas de diferenciarse, generar confianza y proyectar una propuesta de valor sólida para fortalecer la democracia y la participación ciudadana.

Por eso, más allá de esta era digital, depende de ellos con la claridad y contundencia que den su mensaje. No solo por sus palabras e imágenes que difunden, sino también por sus acciones, para que cada ciudadano vaya con entusiasmo a emitir su voto el 13 de agosto.